Bodegas Ceres (La Horra, DO Ribera del Duero), presenta Silvanus Edición Limitada 2015, un vino nacido bajo un espíritu protector.
Silvanus, en la mitología romana, es un espíritu protector de los campos y los granjeros. Qué mejor nombre para un vino nacido en viñas casi centenarias, cuidadas generación tras generación por la familia Asenjo en La Horra (Burgos, DO Ribera del Duero).
Pero Silvanus Edición Limitada 2015 es también un gran seductor de paladares. Un “flechazo” que se inicia ya cuando se vierte en la copa mostrando ese color rojo picota intenso, limpio y brillante. Con capa muy alta, característica de esos vinos de la Ribera del Duero que se han elaborado con una uva de primerísima calidad, generalmente de cepas centenarias.
Y continúa seduciendo en nariz, mostrando aromas de fruta negra muy madura, mezclados con notas balsámicas, tostadas y minerales, vainilla, cacao, tabaco y especias… Una delicia. Pero Silvanus “El seductor” nos sigue hechizando en boca, por su voluptuosidad, sus taninos nobles, su equilibrio. Es un vino muy expresivo y de larga persistencia, que viste de smoking.
Elaborado con uva 100% tempranillo procedente de viñedos que tienen entre 70 y 90 años, ha pasado 16 meses en barricas de roble francés y 20 en botella. Es un vino de autor que cumplirá con las expectativas de los que le degustéis, encandilando los paladares más exigentes y siendo apto para veganos.
PVP: 22€
BODEGAS CERES
Si Silvanus era el espíritu protector de campos y granjeros en la mitología romana, Ceres era la diosa de la agricultura, las cosechas y la fertilidad. En ellos se inspiraron los hermanos Asenjo a la hora de crear su proyecto vitivinícola en la tierra de sus antepasados, continuando la tradición iniciada por el abuelo, Aquilino Asenjo, que en 1908 puso los primeros plantones de Tinta del País (Tempranillo) en el pueblo de La Horra, Burgos, (Denominación de Origen Ribera del Duero).
Como las deidades romanas, Aquilino y su hijo Teófilo se erigieron año tras año en protectores de un excepcional viñedo que iba ganando valor con el paso del tiempo. Esa es la herencia que ha recogido la tercera generación.
Jesús Asenjo fundó en 2004 junto a sus hermanos Bodegas Asenjo & Manso, (ahora Bodegas Ceres) pudiendo así transformar la gran calidad de sus uvas centenarias, que cuidan con el mayor respeto, en unos grandes vinos. Vinos equilibrados, sensuales y de estilo moderno, pero con raíces en la tradición, que reivindican la identidad del terruño que los grandes viñedos de La Horra proporcionan.
Su elaboración es de vinos de alta calidad, con la premisa de controles que comienzan en los viñedos y terminan en bodega. Gracias a las 45 hectáreas de viñedo familiar, Bodegas Ceres es una de las pocas que logra autoabastecerse garantizando un estricto control de calidad y una inmejorable homogeneidad en las 180.000 botellas que elabora anualmente.